La pesca de llampugas en el Delta del Ebro
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Descripción de la llampuga y época de pesca
La llampuga (coryphaena hyppurus) es un pez de la familia de los corifénidos, con cabeza grande, muy particular por su pronunciado abombamiento. Las escamas de su cuerpo son muy finas, de tacto suave. Recién sacada del agua ofrece unos colores bonitos y llamativos, básicamente azulados y amarillentos . La aleta del lomo es seña de identidad de la llampuga: sólo de radios blandos, ancha, va desde la nuca hasta casi la cola. También es muy característica de la llampuga la forma
ahorquillada de su cola. De carne muy sabrosa, es poco vista en las lonjas de pescado. Muy pescada y apreciada gastronómicamente en la Islas Baleares, donde no resulta nada barata conseguirla. Además es pez de temporada por lo que respecta a su captura. En el Delta del Ebro aparece cada año a mediados de agosto, y aquí se queda hasta finales de noviembre, cuando los primeros temporales empiezan a enfriar las aguas. Este año 2014 han sido extremadamente puntuales, en el puente del 15 de agosto, la festividad de Santa María, se han empezado a capturar en el Delta del Ebro. Existe una leyenda urbana, que me contó un pescador en Palma de Mallorca, que dice que el nombre de llampuga, viene de “llamp”, que en catalán significa “relámpago”, pues se asociaba la llegada de estos peces a la aparición de las primeras tormentas de verano. Jamás pude contrastar esta teoría, pero no descarto su certeza.
Dónde se ubican las llampugas en el Delta del Ebro
En el Delta del Ebro , y enmarcando su captura a la pesca deportiva costera desde embarcación, se localizan en zonas donde la profundidad va desde los 25 metros hasta los 90, pero casi siempre a ras de superficie. Esto significa que se pescan entre 2 y 6 millas de la costa aproximadamente, es decir, se tarda muy poco tiempo en llegar. Como veis, no es posible pescar llampugas desde la costa, pues jamás se acercarán tanto como para estar a tiro de nuestros lances. Merece la pena ir en busca de una empresa de alquiler de embarcaciones; con una embarcación de 5 metros de eslora y
motor de 40 C.V. será suficiente para perseguirlas. En el Delta del Ebro están disponibles por poco más de 80 Euros para medio día, más el combustible que se gaste. A pesar de que este tipo de embarcación está homologada para navegar 6 personas, para la pesca de la llampuga yo recomiendo ir 3, máximo 4 personas, para tener buena movilidad dentro del casco. Lo cierto es que el coste de media jornada de pesca repartido entre los 3 o 4 pescadores sale razonablemente económico.
Cómo localizar las llampugas
Hay varias maneras de localizar los bancos de llampugas. Se puede ir recorriendo millas a motor observando con los prismáticos las concentraciones de gaviotas que van en busca de pequeños pececillos y probar allí, bien con pasadas al curricán o a spinning. Pero también es posible que nos encontremos que el banco que estamos pescando sea de túnidos (melvas, bacoretas, bonitos, etc…) y caballas. Por mi experiencia en el Delta del Ebro, las llampugas no suelen mezclarse con túnidos y caballas, en cambio es frecuente pescarlas solas o junto a jureles y pequeñas serviolas. Otro método que también requiere hacer millas a motor es ir vigilando con los prismáticos la superficie de las aguas para
detectar los movimientos de los bancos de llampugas saltando a gran velocidad por encima de la superficie del agua en sus desplazamientos. Al ser numerosas es relativamente fácil verlas, pero esto sólo ocurrirá si se encuentran en la fase de desplazamiento, si ya están ubicadas este sistema no nos servirá. Por otra parte no olvidemos que las llampugas no dudan en esconderse bajo cualquier obstáculo natural o artificial que encuentren, una tabla flotando, un manojo de cuerdas y redes a la deriva, acumulación de algas, etc.. Y no digamos si ven una boya, allí estarán dando vueltas, aunque frecuentemente no se dejan ver. Es habitual en el Delta del Ebro observar embarcaciones practicando el curricán para la
llampuga en trayectoria paralela a la línea de aguas que se forma por las corrientes y encuentros de aguas. Esta línea de aguas tiende a acumular todo tipo de los objetos anteriormente mencionados, constituyendo un hábitat muy atractivo para las llampugas. Se navega a unos 10 metros de la línea de aguas, y la verdad que funciona. Personalmente yo soy más partidario de navegar más alejado y a motor, sin hacer curricán, y seleccionar la parte de esa línea de aguas que acumula más material en flotación para hacer unos lances a spinning, me funciona todavía mejor, muchas veces no ves ningún movimiento, pero salen como locas cuando divisan el señuelo. Y cuando no contamos con ninguna de estas pistas no queda más remedio que practicar el curricán a ciegas.
Señuelos que funcionan para las llampugas
Para hacer el curricán a ciegas, sin señales de por dónde andan las llampugas, yo recomiendo “hacer mucho ruido” en superficie. Es decir, usar un excitador, también llamado avión por su forma que recuerda a éste. Los excitadores o aviones suelen ser de plástico o de madera
generalmente, y se colocan entre la caña y los señuelos a utilizar. Su función es saltar por la superficie chapoteando para hacer saltar agua y que en su caída sean un atractor para los peces que navegan en capas más profundas. Es decir, despiertan la curiosidad de los peces que imaginan que hay ataques en superficie y por consiguiente que hay comida a la vista. Y si realmente funciona el pescado debe subir a ver qué pasa, y entonces se encuentra con los verdaderos señuelos que suelen ir en metralleta de dos o de tres detrás del excitador, navegando a unos dos o tres metros de éste. Generalmente se usan como señuelos pulpitos de vinilo de diversos colores provistos de un anzuelo simple o plumas con
anzuelos dobles. Una velocidad de unos 4 nudos será suficiente. Si el mar está plano, con menos velocidad también nos valdrá. De cara al spinning, tenemos múltiples opciones. A mí la que más me gusta es usar los jigs, y
especialmente los de 40 gramos. Con ellos se logran lances muy largos con la ventaja de que el pescador regula si quiere pescar casi en superficie, por lo que empezará la acción de recogida instantes antes de que el jig toque el agua, o por el contrario podrá tantear todas las profundidades que desee dejando hundir durante más segundos el señuelo. De hecho, si dejamos hundir el jig hasta tocar el fondo, podemos practicar el jigging, que consiste en mover de forma vertical el señuelo, dando tirones hacia arriba y dejándolo caer, probando diferentes sondas. De esta manera podemos buscar dónde están, dónde pican. Los peces artificiales también son muy buenos para las llampugas, unos trabajan
más arriba y otros hunden más, se tiene que ir probando. También al curricán son efectivos. Si se piensa que las llampugas no están muy abajo, la opción de pez de vinilo también es buena, pero para su lance tendremos que ponerle a metro y medio o dos, un buldo relleno de agua (entre la caña y el señuelo) que nos hará las veces de peso para lanzar más lejos.
Hay otros pescadores que prefieren plomar la línea directamente. Por último, mencionar los streamers para la pesca a cola de rata, en el Delta del Ebro usamos unos artesanales creados por José Agudo, conocido pescador murciano, que van de fábula.
La picada y el combate de la llampuga
La llampuga es un pez muy bravo y muy deportivo en su combate. La picada es seca, muy sorpresiva, practicando spinning con multifilamento, que no tiene prácticamente elongación, es casi automática, se clava ella sola, y si el pez ha tomado el señuelo relativamente cerca de la superficie los saltos fuera del agua están asegurados. Son espectaculares, con frecuencia sacan por completo su cuerpo del agua, y a pesar de ese gran esfuerzo, cerca de la embarcación no escatiman en rápidas carreras en
todas direcciones. Es muy habitual ver numerosos ejemplares alrededor de la llampuga en combate, es el momento en que otro pescador de la embarcación pruebe a tentar otra compañera. Se debe tener en cuenta que si se producen picadas y no se clavan las llampugas, es síntoma que nuestros anzuelos son demasiado grandes, deberemos seleccionar otros más pequeños. No olvidemos que la llampuga tiene una boca muy pequeña en proporción a su cuerpo.